CODHECUN-0289

CUBA LA MUERTE DE MACEO Hé aquí el texto de la nota dirigida al World por el general Weyler, de que anticiparon un extracto los telegramas de Nueva York. “Al director del World, de Nueva York: Maceo murió por efecto de la poca consistencia de las partidas de la Habana, que sin duda al ataque brusco de San Quintin cedieron, y para rehacerlos se puso al frente y murió con parte del estado mayor que le acompañaba. Así han muerto muchos generales en todas las guerras del mundo. Maceo no murió en una emboscada. Lo prueba que la columna española tuvo que sostener fuego con bastantes fuerzas insurrectas, suficientes para recoger el cadáver de Maceo y el del hijo de Máximo Gomez que traían la columna. Estaba rodeado de los suyos, de los sque con él pasaron la trocha embarrados, según afirma su médico Zertucha. No es cierto que concurriera á ninguna conferencia, por dos razones. Primera, porque estando yo en Pinar del Río no iba a citarle en la provincia de la Habana, y segunda, porque sabiendo yo en situación apurada en Pinar del rio que pedía le fueran á ayudar, no iba a ser tan cándido que accediera a conferenciar con él en lugar donde estuviera fuera de la línea y ya pasada, con lo que resolvía el romper el cerco que yo le tenía á él y sus fuerzas. Maceo murió como muerte todo aquel que manda fuerzas que á la vista del contrario huyen. -Weyler Historia de un cabecilla El cabecilla cubano Juan Rus, muerto por nuestras tropas, era muy conocido en Barcelona. Juan Rus era uno de los beneficiados por el convenio del Zanjón, é hizo la anterior guerra separatista en calidad de brigadier de las filas insurrectas, cuyo empleo le fué reconocido en virtud de aquel convenio. Algún tiempo despues de terminada la insurrección, establecióse en aquella ciudad, siendo en estos últimos tiempos asiduo concurrente al café Continental, á donde dejó de concurrir ocho días después al en que abandoné á Madrid Calixto García, de quien era íntimo amigo y camarada. Al marcharse de Barcelona á Cuba disfrutaba una pensión mensual que le pasaba el Estado, y dejó á su familia en un piso de la calle de Aragón donde parece que habita aún.