EL GOBERNADOR GENERAL
DE LA
ISLA DE CUBA.
PARTICULAR.
Habana 10 de Setiembre 1890
Señor Don Cárlos Fernández Shaw
Mi querido amigo: en la imposibilidad de escri
birle de mi letra, cumplo este encargo á mi ayudan
te secretario, para que pueda darle algunos detalles de
como he encontrado esto.
No creía yo que este país pudiera encontrarse en tan
malas condiciones como lo he hallado y puedo asegurar
que ha haber seguido algun tiempo mas la marcha de
gobierno que aqui se seguia, pronto muy pronto nos
hubieramos encontrado sorprendidos en una nueva in
surreccion pretendiendo la Independencia de esta Isla
Unos días antes de caer enfermo el General Salamanca
hizo venir á Antonio Maceo (don) Antonio mayor General que había sido de
las fuerzas insurrectas del Departamento Oriental y el cual
conspiraba desde afuera de la Isla. Deduzco que la lla
mada habria sido con objeto de ver si lo atraía por
medio de ofertas, cosa que no hubiera sido probable
porque las ambiciones de este hombre son muy altas
pues sus pretensiones son desde el año 1879, organizar
un estado de color en el Departamento Oriental de
esta Isla, que comprende desde Manzanillo á Cuba. Para
ello cuenta con el apoyo de la Liga Antillana, que la for
man los elementos de color de Santo Domingo y A Haiti
especialmente de este último punto donde toda su pobla
ción es de color.
Este plan no lo puede defender abiertamente y co
mo necesita el apoyo del elemento blanco, su propagan
da se reduce dirijía á defender por ahora la Independencia de la
Isla.
Como Salamanca cayó en cama y á los pocos
días murió, no pudo hablar con el.
A la llegada de Maceo á la Habana tuvo sus entre
vistas con sus antiguos compañeros de color y blancos,
todos Jefes insurrectos de la pasada Guerra que hoy
estan aquí dedicados á sus negocios; y son Lacret, Co
llazo, Sanguily, Roa, Suarez, Figueredo y otros mas
y les espuso sus planes revolucionarios tendencia de lanzarse nuevamente al cam
po hasta para conseguir la Independencia, manifestandoles que
él ya llebaba algunos trabajos en el Departamento
Oriental. La mayoría Muchos de dichos tres jefes le contestaron que
no pensara en eso y que sería una locura intentarlo,
por no ser el momento oportuno
El llamado Lacret con otros compañeros suyos tiene ne
gociadas grandes cantidades en titulos de la deuda y
abonares, y con objeto de darle proteccion á su antiguo
Jefe le propuso que sí el desistia de los propositos que
traia le darían intervencion en el negocio de ellos y
que de ese modo podría tener con que vivir. Empezaron
por darle una cantidad en abonares atrasados; con ellos
se presentó al Gobernador General diciendole que él á la
pacificacion del Zanjon no había cojido cantidad al
guna y que hoy se veia sin recursos y con aquellos abo
nares que él había negociado. El Gobernador General
le hizo algun pago de dicha cantidad. Maceo
creyó que podía explotar esta mina, mas como
no había de donde pagarsele y sobre todo el pago
era ilegal, y viendo que pasaban días y no se
le pagaban nuevas cantidades, consultó á sus com
pañeros y les indico que él tenía en Santiago de
Cuba unos terrenos y que como carecía de recursos
iba á proponerle al Gobierno que se los com
prase en 50.000 duros. Le rechazaron la idea di
ciendole que no hiciese tal cosa porque entonces su
prestigio decaeria mucho, porque ní la ocasíon era
la mas propia, ni los terrenos podian valer dicha can
tidad. Como en parte del elemento blanco de la Ha
ibido por este lado y deseosos de seguir sus fines
empezó á sondear el elemento de color de la Habana
y del Campo, a el cual hablo propicio y hasta tuvo
una conferencia con el bandido Manuel García titu
lado Rey de los Campos. bana no encontró todo el apoyo que el esperaba, se dirijió al
elemento de color y hasta tuvo dos conferencias en el campo
con Manuel Garcia que es el bandido que se titula Rey
de los campos Sabido esto por Lacret y otros
compañeros le retiraron la protección que le habían
dado y cesó de tener participacion en los negocios
de aquel, participacion que se la había dado con
la precisa condicion de que habia de estar tranqui
lo.
[tachado: Falto de este apoyo y siguiendo su pensado plan Hechos en la Habana los pocos trabajos que pudo
se dirigió a su verdadero campo de acción pidió autorizacion á Chinchilla para hacer una vi
sita á su familia en Santiago de Cuba y ver si
podía vender sus terrenos, autorizacion que le fué
concedida. Con este pretesto llego en el mes de Julio
á Santiago de Cuba donde ya le esperába el mulato
Flor Crombert para darle cuenta de sus trabajos.
Este mulato, desde la terminacion de la campaña
habia estado emigrado en las republicas de Jamaica EL GOBERNADOR GENERAL
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Santo Domingo y Haití sin querer reconocer la for
ma de Gobierno en esta Isla, mas en hasta Enero del año
1889 que por gestiones que hizo con nuestros consules, le au
torizaron á fijar su residencia en Santiago de Cuba, des
pues de haber publicado él un manifiesto en el cual
declaraba que desengañado de sus herrores se acogia al
Pabellon Español. A su llegada pidió recursos al General
Salamanca para trabajar y este se le proporcion[corregido sobre: ó+aron] en clase
de prestamo, la cantidad de 1.000 pesos con la condi
cion de que los fuese devolviendo poco á poco. Con este
dinero estableció un corte de Maderas en Jarahueca, zo
na de monte, distante de Cuba unas 13 leguas. Allí hay
bastante capitulado de la pasada campaña y empezo á
hacer propagada entre ellos para que se prepararasen.
En esta situacion fué cuando Antonio José Maceo llegó á Santiago
de Cuba. Como éste había sido el Caudillo en aquel De
partamento, fué recibido con grande alegría por el elemen
to de color que allí esta en una proporcion del 75 al 80
-- % sobre el blanco, y por una parte también del ele
mento blanco que figura en el partido Autonomista y
muchos de los que habían sido en la guerra subor
dinados suyos. El partido Autonomista lo dirige en
Santiago de Cuba Don Urbano Sanchez Echeverria y este
fué uno de los que con mas consideracion lo recibío, sin
tener en cuenta que era Jefe de partido y que con ello
se significaba demasiado.
A los pocos dias de la llegada le dieron á Maceo
en el Restaurant "La Venus" un convite á el cual asistió el
Señor Urbano Sanchez con otros diez comensales presidiendo la
mesa Maceo y teniendo por centro de mesa una estre
lla solitaria de flores emblema de la Independencia
de Cuba. A los postres, uno de los comensales hijo
de Cuba pero ciudadano Americano, brindó por la
anexión de Cuba á los Estados Unidos, pero Ma
ceo le contesto que antes que esto sucediera, él se
batiría al lado del ultimo soldado del egercito
español, porque esos no eran sus ideales sino otros
Maceo hizo sus escursiones á los poblados del Cris
to, Moron, Dos Caminos y San Luis y en todos ellos
fué recibido por grupos, algunos de 200 hombres de gente de
color y blancos que lo aclamaban "Viva el General Maceo"
Al ver esta acogida decidió quedarse en Santiago
de Cuba y por telegrafo mandó venir su familia que
se hallaba en Jamaíca la cual llego el día 20 de Agos
to.
El partido Autonomista, los que no se habían directa
mente en protejer á Maceo, llamaron la atencion de su
Gefe, le hicieron oir el grave compromiso en que todo el ele
mento blanco se ponia porque se sabía perfectamente que los
planes de Maceo eran recibir toda la ayuda posíble
del elemento blanco y á la hora del vencimiento, sí llega
ba, descartarse de aquel. Ademas sabían que Maceo
en una de las conversaciones de la Habana en la cual
se había tratado de política había dicho "En cuanto
venga el vencimiento nuestro, confiscaré los bienes de
todos los Autonomistas y luego los deportaré.
Urbano Sanchez que ya habia reconocido su falta
pero que carece de energia, obligado por una fraccion del
partido se reunieron en junta y allí acordaron reserva
damente que era necesario ver el modo de reunir fondos entre
ellos (2000) pesos, y darselos á Maceo con la condición de que
se marchara de la Isla puesto que así aconsejaba la si
tuación crítica que se hallaba la provincia y la
desconfianza que todo el mundo habia apoderado.
Ademas como Maceo había dicho en Cuba que venía auto
rizado por sus compañeros de la Habana para prepa
rar el movimiento insurreccional, comisionaron á su
jefe Blanco capitulado, que hoy esta completamente dedi
cado á sus trabajos y familia en la zona de Ti-Ar
riba de Santiago de Cuba, para que fuese á la
Habana y averiguar lo que hubiera de verdad.
En esta situacion llegue á la Isla y héchome
cargo en dos dias del gran peligro que amenazaba
resolví combatirlo. Para ello empecé por explorar la
situacion en que se encontraban los capitulados de
la Habana quienes la mayoría que yo conozco
se hallaban deseosos de trabajar y no meterse en
aventuras pero me llamaron la atencion del gran
peligro que corria el Departamento Oríental, peli
gro que ya yo lo sabía desde Puerto Rico á donde
me habían dirigido confidencias seguras de cuan
to pasaba. Supe tambien que en la Habana habían
tenido una junta de Jefes Capitulados y de que en
vista de las intenciones pacíficas que yo traía y
la de protejer á todo hombre honrado sin distincion
de colores, á cuya junta asistió el comisionado
que vino del Departamento Oriental; acordaron
formular una fuerte protesta en contra del Ma
yor General Antonio Maceo y dirijirla á sus EL GOBERNADOR GENERAL
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á sus compañeros del Departamento Oríental.
El titulado Coronel Castilla (blanco) al saber esto y par
tidario de los proyectos de Maceo, le escribió á Cuba
diciendole lo que pasaba y que aquel mismo día salia
él para Holguin donde tenía gran influencia á or
ganizar el movimiento insurreccional, movimiento que
era necesario activar. Que desde alli se pondrían de acuer
do para lo antes posible lanzarse al campo.
En vista de ello tomé mi resolucion y por telegra
fo hice embarcar para el extrangero á Maceo y
á Castillo y al mulato Flor Crombert se ha obli
gado tambien á que se vaya á Jamaica.
De este modo he conseguido aplazar por ahora
el movimiento que se nos venía encíma, movimiento
que hubiera sido desastroso. Ahora conspirarán desde fuera
pero ya procuraré yo cortarles las alas. Yo me
atraeré al elemento que ha estado en armas y siento
que las urgentes ocupaciones que hoy tengo aquí y
sobre todo la preferentísima de la extirpacion
del bandolerismo, no me permíta de momento ha
cer una escursion á aquel Departamento.
La
plaga del bandolerismo la he encontrado tan profun
damente arrigada que ha de costar trabajo extir
parla.
Hasta hoy me he dedicado á llevar á cabo mí plan
poniendo en primer termino su seguridad la pro
piedad y las vidas de los hacendados. He puesto en
libertad á todo el que estaba sumariado por encu
bridor puesto que no pueden jusgarse como tales
cuando el gobierno no les da ayuda y proteccion
de tfuerzas para sus vidas.
He distribuido las dos provincias donde el
bandolerismo tiene sus reales en zonas y en
cada una de ellas he colocado una fraccion con
un oficial haciendole responsable de lo que en ella
ocurra. A los Alcaldes, que algunos de ellos eran
encubridores de verdad, les he ecsijido responsa
bilidad y para ello les he dado una escolta de
caballería para que ellos persigan á los bandidos.
Ahora tiene que empezar el trabajo fino de con
fidencias.
Hasta hAhora, desde mi llegada, estan
aplastados y nada han hecho.
Confio por este medio poder terminar esta
plaga.
Como estas operaciones traen consigo unos
gastos tan grandes, ínterin no pueda terminar
con aquellos no me es posible poderle asígnar la
cantidad que me indica, pero pasada esta situa
cion lo haré gustosísimo.
No puedo extenderme mas. Vere lo
que tu hermano necesite y trataré de com
placerlo.
Se reitera tuyo affectísimo amigo y pariente
