EL JEFE DE ESTADO MAYOR de la COMANDANCIA GENERAL DE SANTIAGO DE CUBA y octubre 10 de 1891

Mi querido amigo Lecumberri: á su debido tiempo recibí sus telegramas y carta sobre mi destino de Jefe en esta y crea Usted que le estoy muy agradecido lo mismo que al General por haberse llenado mis deseos. Ya hacía tiempo que estaba encargado por enfermedad de Castañera que ya no está ni para despachar un negociado del Supremo, y el día mismo que llegó la orden me hice cargo en propiedad. Ahora yo sabré corresponder á la confianza que se me ha hecho.

Y ya que estoy con la pluma en la mano, y a pesar de estar reventado de trabajo desde hace días, le haré una sucinta reseña de lo que por aquí pasa.

Parece que efectivamente se tenia preparado un movimiento revolucionario para estos días, probablemente para hoy aniversario del grito de Yara; pero hemos tenido la suerte de que á tiempo recibimos noticias, que aunque vaguísimas, nos metió en cuidado y empezamos a tomar medidas previsoras de colocacion de fuerzas y dar el alerta á toda la gente militar recomendándoles husmearan lo que en cada localidad se susurrase ó tramase. Hay que hacer justicia al elemento militar de esta Comandancia General, desde ese momento y sin tener ni pedir los medios y elementos que la cosa exíge, y ya no le hemos perdido un momento la pista á los agentes de la cosa. Por ello se ha venido en conocimiento de que la cosa se extienda á casi todas las jurisdicciones de la Provincia y sin relacion con las otras provincias; que el movimiento ó manejos obedecen á Maceo y otros emígrados que se hacen grandes ilusiones creyendo que estamos todavía en otros tiempos; que se observa que la gente comprometida es en general de poco viso y negros y capitulados ó que han hecho la guerra y que el tiempo les ha quitado el prestigio que tuvieron y en fin además algunos irreconciliables perpetuos que todos conocemos y que simpatizan y trabajan y trabajarán siempre por todo lo que sea guerra á España. Pero tambien se puede asegurar que el elemento sano de la Provincia de todas las ideas, lo que se puede llamar la opinion pública es opuesta en en todo á todo movimiento y alteracion del orden público. Y como nos encontramos completamente preparados y prevenidos y nos sobran fuerzas, gracias á la solicitud y al buen mandar del General Polavieja, que contrasta tanto con lo que hemos estado acostumbrados, y si no fuera por los perjuicios que ocasionaría una algarada cualquiera para el crédito y los negocios (de minas sobre todo) y el mal efecto para el Capitán General, el Gobierno y el País en general, que podría producir cualquiera algarada o desembarco, de Maceo, como nos encontramos completamente preparados, creo que hasta sería un bien que se echasen al cabo porque estoy casi seguro les seguiria poca gente ó ninguna y les costaría la cabeza. Pero nos hemos llevado y llevarémos del criterio de prevenir á todo trance aunque fura preciso echarle mano á Dios Padre. y felizmente con la aprobación del Capitán General. No obstante hasta ahora EL JEFE DE ESTADO MAYOR de la COMANDANCIA GENERAL DE SANTIAGO DE CUBA no ha sido de absoluta necesidad hacer ninguna pues unas que le habían ordenado en Jigüaní por informes de un oficial de guardia civil, despues tiempo resultaron algo exagerados y se mandaron suspender hasta tener mas datos.

Ahora acabo de descifrar un telegrama cifrado y muy confuso de Manzanillo en que participan que en Campechuelo ha habido unos tiros como hacía Cenestel. y á media noche, sin novedad. Parece poca de poca importancia pues del puesto de guardia civil salieron á reconocer y hasta cogieron á unos; se han pedido detalles. Hoy, aniversario del grito de Yara parece va a pasar sin mayor novedad.

Tambien acaban de comunicar de Guantánamo que fuerzas de Capitán Condines de la guerrilla de Limones sorprendieron malhechores matando al celebre chino Velazquez y otro. Es una buena noticia y está visto que por acá no germina esa fruta. Aunque por acá se hila muy delgado, comprendo que tambien se trabaja con mucha suerte.

Pensé escribirle al General dándole las gracias; pero no me queda tiempo y lo haré en el siguiente vapor; miéntras tanto anticípeselos de mi parte y enterarle de lo que le pongo en esta de asuntos del servicio que sé que siempre le interesan vengan de donde vengan. Y sin más, amigo mío, consérvese bueno y mande á su afectísimo amigo

Fernando Kindelan

Post.Data. Si Usted pudiera conseguir que el telegrafista de Jiguaní Don. Rafael Lorenzo Calonge, veterano de la campaña con más de 20 años de servicio, lo trasladaran á Bayamo ó Manzanillo donde siguiera puede atender algo á la educación de sus hijos, se lo agradecería á Usted mucho. Es un amigo viejo á quien desearía servir.